Otras Prácticas: COOLHUNTING

¿Han escuchado en estos últimos años la palabra Coolhunter?

Tal como pasa en diversas áreas de negocios, cuando los altos ejecutivos, diseñadores, publicistas o creadores se consagran o logran cierta posición, suelen caer en el mismo error que los 'rock stars': se vuelven inaccesibles y se alejan de la realidad, de lo cotidiano.

Desde los 90's las grandes empresas de la moda, sumidas en graves crisis creativas, no sabían qué hacer para lanzar una nueva colección de productos. La tarea era bastante ardua, porque ese nuevo producto debía ser 'el grito de la moda' entre los jóvenes y para qué decir que debía venderse como pan caliente.

Después de estas exigentes demandas, algunos ingeniosos ejecutivos dejaron de trabajar de la misma forma como lo habían hecho antes: creando productos para consumidores desde sus escritorios, frente a sus computadores y sin tomarse unos minutos para salir a respirar aire fresco a la calle. La solución fue muy fácil: ¡salir a la calle! (o contratar a profesionales que salieran por ellos).


¿Cool...qué?

Un Coolhunter es una persona con estudios universitarios, que además ha recibido una educación complementaria sobre las herramientas de medición sociológicas y de mercado.Son jóvenes profesionales que se lanzan a la calle para observar las tendencias socio-culturales de la gente. En este trabajo no hay cita ni tampoco entrevistas, sólo observar, mantener conversaciones espontáneas y estar en los lugares más tendencistas de la ciudad.

Los comienzos de esta profesión datan de finales de los años 80 y surgieron de la necesidad de las grandes empresas de satisfacer los gustos y preferencias de sus clientes y de estar al día de lo que sucede.

El Cazador de tendencias tiene la capacidad de "visionar" lo distinto, la tendencia. Es una persona que tiene sus sentidos entrenados para captar detalles o características originales que serán atractivamente adoptadas por el resto de la población en un futuro cercano.

Se rodea de lo más "trendy" del lugar, se pasea por los clubes de moda, galerías, exposiciones de arte, conciertos, eventos culturales, tiendas, restaurantes e incluso las mismas casas de las personas observadas (matizando con entrevistas etnográficas). El perfil de un Coolhunter es de un profesional joven, con bases intelectuales y artísticas, intuitivo, con capacidad de investigación y lo más importante, mucha curiosidad.

No trabaja entre 4 paredes, su oficina es la calle. Su material de trabajo son informes llenos de notas, fotos, dibujos y descripciones de estilos que preparan para marcas, diseñadores, empresas o centros de investigación de mercado.

Para un coolhunter es muy importante que sus notas sean objetivas. Utilizar adjetivos como “bonito” o “feo” o “esto es divertido” no van en sus informes, ya que un dato tan banal como que los jóvenes no se atan las zapatillas o que utilicen 2 relojes en vez de uno o que guarden el tarro de café en un lugar especial es en realidad una herramienta de trabajo para los investigadores del mercado.


Para conocer más en detalle el Coolhunting, visíte http://www.futureconceptlab.com